Para armar el botiquín, además de los elementos básicos, es
conveniente platicar con el médico familiar para que sea él quien nos aconseje
qué debemos tener a la mano, considerando los padecimientos de la familia, como
pueden ser presión arterial alta o baja, alergias, gastritis...
Es recomendable que el botiquín siempre esté en un lugar
accesible y conocido por todos los miembros de la familia y revisar
periódicamente la fecha de caducidad de las medicinas, así como reponer el
material utilizado.
Algunos elementos básicos de un botiquín son: manual de
primeros auxilios, alcohol, algodón, Isodine, aspirinas, jabón, lámpara de
mano, antidiarréico, antihistamínico, vendas, gasas, “micropore” y tela
adhesiva, gotas para los ojos, crema antiséptica, loción calmante para el
dolor, analgésicos, pastillas para el mareo, pinzas de punta plana para
astillas, etc.
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